Seamos sinceros, un redactor de textos en Mallorca no puede saber de todo. Ahí entra el uso de las IA (Inteligencia artificial). Son el punto de partida para crear cualquier texto especializado. Luego lo adaptamos para que sea atractivo para las personas y lo aderezamos con un poco de SEO que le de buen sabor. El resultado es un artículo de 2.000 palabras que pueda ocupar los primeros puestos de Google.
Aunque pueda parecer sencillo el uso de las IA (Inteligencia artificial), la verdad es que requieren de un lenguaje especial para comunicarse con ellas. De ello dependerá que nos de unos textos válidos o un popurrí que encuentre por Internet.